Más información
E-Shop

Blog

Historia de fortaleza

Historia de fortaleza

¿Cuál es la diferencia entre una historia que nos hace fuertes y otra que nos hace víctimas?

La perspectiva que tomamos.

Lo que podedemos aprender de las personas que salen adelante de una crisis, es la actitud que toman ante ella viéndola como una oportunida de adaptarse al cambio y crecer. Los estudios de personas que superan una crisis, nos muestran que la diferencia de alguien que navega las crisis con éxito, depende del ángulo desde dónde perciben la realidad. Hemos observado como varios seres humanos pueden vivir la misma situación, y son algunos los que salen adelante, siempre contando la misma historia, vieron una oportunidad en esa dificultad o situación dolorosa que enfrentaron; observaron el problema con una mirada que buscó “el COMO SÍ”. Tuvieron la capacidad de conectarse con la esperanza de pasar la prueba y superar lo que vivían. Con estas experiencias, nos dejan un ejemplo.

Una crisis nos hace revisar nuestros valores, nuestros recursos interiores, nuestra misión y nos invita a poner la mirada en nuestro lado espiritual, para recuperar la confianza y saber que SE PUEDE. Puede ser por medio de alguien cercano que nos conoce y ha visto nuestro potencial que aveces nosotros olvidamos. También por nuestra espiritualidad, por los valores que tenemos con el recuerdo de alguien que no está con nostros fisicamente, por medio de un amigo, un familiar, un doctor o alguien que mágicamente se cruza en nuestro camino y nos recuerda que es posible.

Cuando hablamos de actitud y fortaleza interior, nos referimos a la determinación y motivación para querer estar mejor y tener presente la meta de nuestro bienestar. Con el objetivo de parar de sufrir por ese evento y salir de ese espacio obscuro de dolor. Pra esto, es indispensable, conservar la energía mínima para navegar en modo sobrevivencia, en donde pasar el día cubriendo nuestras necesidades de sueño, alimentación, hidratación y seguridad, es básico. A partir de ahí, reconocer la situación en la que nos encontramos, para entender lo que estamos viviendo, sentir loq ue nos produce esa situación y reenfocar el objetivo de nuestras acciones (6 R´s Respira-Regresa a ti -Reencuadra la crisis en oportunidad – Reenfoca -Requiere ayuda -Reconoce lo que hiciste).

Hay que elegir a las personas adecuadas para navegar una crisis. Se requiere que nadie te quite tu energía, sino todo lo contrario que te sume, te alimente y te sostenga. Siempre ayuda compartir nuestra historia con alguien que sabe escuchar y reconoce nuestras fortalezas, porque a veces es importante que nos las recuerde. Ayuda tener un buen oído que no juzgue, que hable con sinceridad y claridad; que con su presencia te haga saber que ahí está para ti, y se alimente tu valor y confianza.

Cuidar lo que escuchas, lo que lees, y lo que entra por todos tus sentidos para alimentar tu ánimo. Revisa lo que piensas, no es lo mismo pensar “no puedo con esto” que “Ahí esta otra vez esa idea de -No puedo con esto”. Con la segunda logras reconocer cómo te hace sentir pensar en esa idea, pero reconoces que es solo una idea y empezarás a quitarle poder a las ideas que son inútiles y destructivas, déjalas ir y cámbialas or otras mas constructivas y útiles.

Enfócate en conductas simples como arreglar un cajón, limpiar, arreglar, acomodar, utilizar neustra creatividad para cambiar un espacio, crear una prenda o pintar, decora, nos dará un sentido de poder. Esto aunque sea un ligero comienzo, puede ser un paso importante para ver que somos capaces de reconocer nuestra agencia de cambio.

Elegir la voz que construye sobre la que destruye, la que es útil y se enfoca en resolver, y traernos paz, es básico. Tomar la decisión de una actitud que acepta lo que no podemos cambiar y se enfoca sobre lo que sí, es indispensable para salir adelante. Es una decisión que tendremos en cada momento difícil que se nos presente, elegir un cambio de perspectiva nos va a presentar nuestra historia de fortaleza.